El Parto es Nuestro denuncia ante la directora de salud pública un anuncio de Nestlé en la revista "Anales de pediatría"
Resumimos aquí la denuncia realizada.
- Para ver el anuncio, remitimos a este link.
- Para leer el texto íntegro, pincha aquí.
- Adjuntamos también la Nota de Prensa, para lectura y descarga.
- Reacciones en Prensa: El Mundo: "Nestlé, acusado de hacer publicidad engañosa"
La compañía Nestlé ha publicado en la revista “Anales de pediatría”, Vol. 78, número 2, de febrero de 2013, ISSN 1695-4033 un anuncio en el que recomienda un sucedáneo de leche materna en el caso de los bebés nacidos por cesárea, dando a entender que este producto tiene la cualidad de reducir “en un 46%” el riesgo de infecciones gastrointestinales”, y que “ayuda en los casos de nacimiento por cesárea, introduciendo bifidobacterias en la flora intestinal de los lactantes”.
La evidencia científica es abrumadora respecto a los beneficios que la lactancia natural representa para la salud de bebés y madres en comparación con la artificial. Sin embargo, Nestlé intenta dar credibilidad a las propiedades para reducir enfermedades que atribuye a su producto “Nidina premium 1 leche para lactantes” citando una serie de bibliografía científica que supuestamente avala la preferencia por este producto en el caso de los bebés nacidos por cesárea. Sin embargo como explicamos en el Anexo I de esta denuncia, los estudios citados:
i. no llegan a las conclusiones que Nestlé afirma o dicen justo lo contrario;
ii. están mal diseñados o la muestra es tan pequeña que no pueden ofrecer
resultados relevantes desde el punto de vista científico;
iii. han sido pagados por la industria interesada; y/o
iv. se omite la información que, dentro de esos mismos estudios, desvirtúa por completo el mensaje del anunciante.
En el presente caso estamos ante un uso sesgado de documentos científicos que incumple lo preceptuado en la normativa vigente, ofreciendo una información carente de objetividad y rigor (véase Anexo I), todo ello con la finalidad de hacer creer que, para estos recién nacidos, la alimentación artificial con el preparado del anunciante, que obviamente sustituiría a la lactancia natural, representa alguna ventaja de salud, algo que de ninguna manera está avalado por la evidencia científica, ni por los estudios que se citan, ni por ningún otro.
El mensaje, la finalidad del anuncio, es inducir al lector a pensar que con el sucedáneo de Nestlé se pueden evitar infecciones a los niños nacidos por cesárea, por lo que tiene un carácter claramente disuasorio de la lactancia materna.
La fotografía utilizada para ilustrar el anuncio muestra a un feto en el preciso instante en que es extraído del vientre materno por los cirujanos, sin ahorrar al lector la sangre, el instrumental quirúrgico o la visión del vientre abierto de la madre, que yace inerte entre los guantes de los médicos.
Utilizar esta imagen de una extracción por cesárea contribuye a normalizar la medicalización del nacimiento en su máxima expresión. La figura de la madre está ausente, algo que nos parece contrario a la promoción de todas las estrategias de salud relacionadas con el nacimiento y la lactancia materna, contribuyendo a normalizar y banalizar la medicalización del nacimiento en su máxima expresión. Es preciso recordar que más de un 10-15% de cesáreas significa poner en peligro la vida de madres y bebés y condicionar su salud de por vida.
La asociación ha solicitado que se incoe el correspondiente expediente sancionador por los motivos aquí denunciados.
Orgullosa de pertenecer a esta Asociación, y agradecida a mis compañeras por no desfallecer, y saber pasar de la indignación y la incredulidad, a los actos y la denuncia.
Avergonzada de seguir en manos de una mayoría de profesionales sanitarios-en este caso pediatras- vendidos a las grandes compañías, y sumidos en la corrupción, mediante la aceptación y la indiferencia ante este tipo de hechos lamentables.
Seguimos en la lucha.
Estimado José María:
La AEP se descalifica a sí misma en su conjunto con la publicación de este anuncio, entre otras muchas muestras de estar vendida a los intereses comerciales, como los numerosos anunicios televisivos en los que se asocia con productos desde pañales y colonias, a galletas"muy saludables".
Sé muy bien que una selecta minoría de pediatras está en contra de estas prácticas.
Pero por desgracia no representan a todo su colectivo.¡Ojalá fuera así!
Y por otra parte no tenemos constancia de que ningún pediatra denunciara formalmente este hecho en concreto, ante autoriodades competentes.
Si así ha sido, lo celebro y agradezco profundamente.