Según la Asamblea General de las Naciones Unidas, las mujeres en todo el mundo tenemos el derecho a una atención digna y respetuosa en el embarazo, parto y postparto, sin sufrir violencia ni discriminación. Sin embargo, la violencia gineco-obstétrica (VGO) es una vulneración de los derechos humanos y de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres y de los/las recién nacidos/as. Con estas ponencias, buscamos dar continuidad a la mesa presentada el año pasado en las I Jornadas de investigaciones feministas de FLACSO (Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales), analizando los avances y retrocesos dados desde entonces:
Thais Brandao (Universidad de las Américas - UDLA): La sexualidad es un aspecto de la vivencia del ser humano, que traduce su misma forma de salud en forma de goce y disfrute de la vida. El cuerpo de la mujer pariendo se inscribe en una vivencia que amenaza a los poderes hegemónicos del patriarcado y del capital, que limitan la expresión libre, sexual y subversiva de la mujer. Desde que el cuidado del parto fue biomedicalizado y masculinizado en el siglo pasado en occidente, se instauran procedimientos que naturalizan la “feminización de la mujer” y se normaliza la violencia gineco-obstétrica: “un tipo de violencia institucional expresada en las relaciones de poder que se apropian del cuerpo de las mujeres y de los procesos fisiológicos presentes durante su embarazo, y las etapas relacionadas con la gestación” (OMS, 2014).
María Moreno de los Ríos (El Parto es Nuestro Ecuador): El Parto es Nuestro y la UDLA, iniciaron en 2016 un proyecto para identificar y sistematizar la información sobre la calidad de la atención en el embarazo, parto y postparto -400 encuestas a mujeres en 13 centros públicos de Quito- como un primer paso para abordar la situación en el resto del país y así contribuir a la identificación y prevención de la VGO. Quienes accedan a esta investigación, primera en el país, podrán tomar conciencia de los procedimientos que violentan los derechos de mujeres, recién nacidos y acompañantes, y así evitarlos o no permitirlos.
Samay Schüet (Coalición de Mujeres del Ecuador): La violencia gineco-obstétrica es un problema social que afecta al derecho de las niñas y adolescentes embarazadas a decidir libremente sobre su salud sexual y reproductiva, y atentando contra sus derechos humanos y de los/las recién nacidos, entre otros, el derecho a la información, a la integridad, a la vida, a la salud o a la autonomía. Por primera vez en el país se ha enviado a Naciones Unidas un Informe Sombra al Comité de los Derechos del Niña y de la Niña que incluye la VGO como una agresión directa a sus derechos. También hablaremos sobre otros aspectos del Informe vinculados a la VGO, como la maternidad forzada o la violencia sexual contra niñas y adolescentes.