El día que los hombres querían erradicar la penisiotomía
Penisiotomía:
https://www.youtube.com/watch?v=60wZBMRUt0Q&feature=youtu.be
Por el Dr. Habakuk
Hace tiempo que a todos los hombres mayores de 50 años, en la consulta de revisión anual del urólogo se les realiza la penisiotomía. Un cortecito de nada, para que todo vaya mejor. Es importante para que el urólogo pueda terminar antes, y para ampliar el campo visual durante la revisión.
En el caso de que se le escapan las tijeras un poco y cortan de más, pues no pasa nada, así practicamos coser, que nunca está de más.
Hasta podría quedar mejor que antes, con el puntito demás para la señora de la casa.
¿Que si está demostrado la eficacia de la penisiotomía? Bueno, nadie se ha quejado en todos estos años, y, en fin, es un cortecito de nada, y, sin duda, es más cómodo para nosotros, los urólogos.
Que no se quejen los señores. Antes se cortaba mucho más, se realizaba por rutina. Ahora ya solo cortamos a los primerizos en su primera revisión, para las siguientes revisiones ya hemos pasado a la penisiotomía selectiva, y ya depende de cada hombre. Algunos colaboran más, otros menos.
Ahora resulta que nos echan en cara que hemos instaurado una práctica sin fundamento científico, que nos piden que demostremos estudios que lo avalan. Bueno, todo es discutible, no?
¿Acaso la comodidad del médico no cuenta? Ninguno se ha muerto por una penisiotomía.
Y de unos años para acá, de repente se nos revolucionan los hombres y dicen que se niegan a la penisiotomía. Dicen que les molesta mucho, que es una intervención que tiene consecuencias, hasta hay algunos que nos atacan diciendo que les impide tener relaciones sexuales satisfactorias. Y algún atrevido lo llama “mutilación genital”. Vamos, pero si se cura en nada, es solo un cortecito de nada en el pene, ¿a quién le importa?
Hasta se apropian del lenguaje médico y pretenden aleccionar, que no hay evidencia científica que justifique tal práctica. ¿Pero qué se han creído?.
No colaboran, es un fastidio pasar consulta con estos pacientes críticos, hasta se han inventado un nombre, ahora son hombres empoderados que piensan que saben más que nosotros. Que miran mucho internet, con el doctor google nos hemos topado. Que les afecta en su vida sexual, y, claro, un hombre sin vida sexual, en fin... ¡Pero si la mayoría ya tienen sus 60 años!, ¿dónde van con su vida sexual? Que ya no van a ser padres, tampoco es para tanto. Es que lo quieren todo y siempre.
Y cada vez se quejan más, se organizan entre ellos y se piensan más listos que nosotros. Dicen que hay países donde no se practica la penisiotomía, ni siquiera en las revisiones grandes trianuales; que los médicos allí usan otros instrumentos y que ya no hacen revisiones invasivas, que con buena destreza manual ven lo mismo y, encima, terminan antes. Bueno, pero no nos vamos a comparar ahora con Suecia… es que igual allí, como hace mucho frío, van menos a revisiones. Hasta nos vienen con publicaciones de organismos como la OMS. Pero si la OMS no es nadie en España. La OMS no nos tiene que decir nada tampoco.
Y, ahora, con todo el rollo de que los hombres reclaman ser tratados con respeto, para colmo, se inventaron el término “violencia urológica”. Vaya, que ocurrencia. Por dios. ¿Hasta dónde vamos a llegar? Esto se nos va de las manos. Y todo por un cortecito de nada en los genitales…
¿Os imaginéis que existiera la penisiotomía, igual que existe la episiotomía?
Si nos paramos un momento, y nos imaginamos un mundo con penisiotomías establecidas por rutina y practicadas en todos los hombres desde hace décadas, estoy segura de que los hombres harían todo lo posible por evitarla, ¿no? Pues es lo que pretendemos las mujeres. Que no nos corten gratuitamente y por mera rutina nuestros genitales, porque no nos valen argumentos como “porque siempre se ha hecho así”, o “pero si es un cortecito de nada” o “porque así el bebé sale más rápido”, o incluso “por terminar antes”, o “por curarnos en salud” o “porque así se ha aprendido”.
Porque ya no aceptamos que nos lesionen nuestros genitales, nuestras vulvas y vaginas.
Para leer más: