Como un puente sobre aguas turbulentas: crónica de la Asamblea 2019
Se es socia de El Parto es Nuestro con las entrañas, con el corazón en la boca, con el vello erizado, a flor de piel… Y así se viven las asambleas anuales de socias. Nuestra gran cita nunca nos deja indiferente. Siempre, SIEMPRE, nos remueve las entrañas.
La asamblea 2019 no ha sido distinta.
Ha sido momento de encuentros. Y de abrazos. Porque siempre que nos encontramos hay muchos abrazos. Y mucha comida. Y aun así, acabamos con la sensación de habernos quedado cortas con los primeros. Quizá es que se nos olvida, de año en año, que el hambre que más nos mueve es el que golpea el corazón.
La del 2019 ha sido una asamblea llena de propuestas fuertes y decisivas que marcan caminos que nunca antes habíamos tomado.
También ha sido momento de difíciles decisiones para el futuro. De debates complicados.
Y ahora que ya ha pasado, mientras seguimos buscando la calma tras la tormenta, quiero intentar contaros en qué consistió esta asamblea.
Comenzamos el sábado sentándonos en círculo y haciendo una ronda de presentaciones. Contamos cómo conocimos El Parto es Nuestro y por qué nos hicimos socias. Historias de violencia obstétrica y también historias de superación que nos hacen recordar, todas ellas, que esta asociación sigue siendo muy necesaria hoy en día, que las mujeres somos muy valientes y mucho más fuertes de lo que nosotras mismas creemos, y que cuando remamos en la misma dirección, no hay tempestad que nos detenga.
Después de un descanso para tomar algo, comenzamos con la votación de propuestas.
Las propuestas de este año han sido variadas, desde regulaciones internas, hasta compromisos sobre acciones para impulsar la Estrategia de Atención al Parto Normal en los hospitales, pasando por numerosos acuerdos de adhesiones a diversas causas que, si bien diversifican nuestros objetivos, intentarán hacernos también más fuertes.
El domingo tuvimos el privilegio de asistir a la representación de la obra de teatro “El útero nimio”; un retrato realista (y por ello bastante descarnado) de las vivencias de una madre en el hospital durante y tras su parto. Una representación que muchas de nosotras pudimos reconocer como vivencia propia y que nos llegó inevitablemente al alma. Un momento de mirarse y reconocer en la otra heridas que, sin ser las nuestras, dolían en lo más profundo. Un momento de sentirse, de darse la mano y notar pararse el mundo. Un momento que consiguió, por más de un instante, arrastrar la parte menos dulce del día previo y dejar a su paso sólo un “ESTOY CONTIGO” mudo, pero no por ello menos sincero.
Una semana después de la asamblea, tras los debates surgidos durante y después de las votaciones y los temas tratados, me veo de repente reflexionando sobre ese “estoy contigo” y sobre la palabra “CUIDADO”.
Cuidado – Acción de cuidar (1). Brindar protección a algo o a alguien, o a uno mismo, para evitar que se desgaste, destruya o enferme (2)
Cuidar - Asistir, guardar, conservar (3)
Y es que en esta sociedad que se mueve tan rápido, que cambia tan rápido, no es nada fácil cuidar. No es nada fácil dejarse cuidar. Conservar algo o al alguien y evitar que se desgaste es arduo y complicado. No desgastarse cuidando tampoco es sencillo.
Muchas veces el cambio es inevitable, incluso necesario, y esta asociación, como nuestra sociedad al completo, va cambiando poco a poco.
Cada cambio nos deja buscando reconocernos como parte de algo en mutación. Y El Parto es Nuestro, es un “algo” por el que vale la pena trabajar y que vale la pena cuidar.
Mientras siga habiendo mujeres que se acercan a nuestros Grupos Locales y a nuestra lista Apoyocesáreas con necesidad de comprensión, vale la pena trabajar.
Mientras haya mujeres que se vean reflejadas en “El útero nimio”, con lágrimas en los ojos y angustia en el corazón, vale la pena trabajar.
Mientras haya socias que se acercan con gratitud a El Parto es Nuestro, vale la pena trabajar.
Mientras haya partos robados y nacimientos violentados, vale la pena trabajar.
Seamos puente y no muralla. Porque valemos la pena. Porque ESTO vale la pena.
Entrada escrita por B.P.S.P.