No es sangre del cordón, es sangre DEL BEBÉ.

Como Asociación, queremos posicionarnos de forma clara y contundente a favor del pinzamiento fisiológico del cordón umbilical (https://pinzamientoptimo.org/).

Hace ya algunas décadas, sin ninguna evidencia científica, y a raíz de la medicalización de los partos y el traslado de los mismos de los domicilios al hospital, se comenzó a realizar el corte temprano del cordón umbilical, que permitía separar de forma temprana a la madre y al bebé, y dejar el quirófano libre lo más pronto posible. Nadie estudió si ese corte temprano podía provocar algún tipo de problema, a nadie le preocupó.

Ahora sabemos que ese corte temprano evita que la sangre que queda en la placenta le llegue al bebé, pudiendo provocar tanto hipoxia por anemia, como un depósito de hierro deficitario en los siguientes meses. En general, en la Naturaleza, los mamíferos cortan el cordón cuando deja de latir, o cuando sale la placenta, asegurándose de que toda la sangre de los cachorros llegue a sus cuerpos.

Por alguna extraña razón, esa sangre del bebé se ha denominado "sangre del cordón", y se anima a padres y madres a "donarla", ya sea altruistamente a bancos públicos, ya sea a bancos privados para tenerla "por si acaso".

Lo primero que hay aquí es un dilema ético, ya que la "sangre del cordón" no existe como tal, es sangre del bebé, y si se le quita al bebé para beneficiar a otras personas, estamos hablando de una donación de sangre de un menor, algo que bioéticamente no tiene ningún sentido. En medicina el principio hipocrático es "lo primero no hacer daño". Y parece bastante claro que privar a un bebé de aproximadamente 1/3 de SU SANGRE, es algo que puede ser potencialmente dañino para el bebé, sea a corto, sea a medio plazo, por disminución de los depósitos de hierro.

Lo segundo, si bien es cierto que es una sangre rica en células madre, también es cierto que hay muchas maneras de obtener dichas células madre de ADULTOS, que pueden hacerse donantes con muchos menos problemas que los bebés, ya que su cuerpo repone la sangre mucho más rápidamente.

Lo tercero, y para aquellos padres y madres que desean guardar esa sangre como un seguro de vida para su bebé... Si les han informado así, les han informado mal. La ONT (Organización Nacional de Trasplantes) anima a todos los profesionales a dar una información veraz, completa y contrastada de las opciones que hay a día de hoy para esa sangre del bebé:

• La madre, la pareja, debe saber que el pinzamiento fisiológico es beneficioso para su bebé. No es correcto explicar que esta sangre se tira.

• Nunca se debe pinzar antes de los primeros 60 segundos (cronómetro en mano). La guía se ve obligada a incluir este apartado en el plan 2020-2025, que antes no tenía en cuenta: “Debe cumplirse con las recomendaciones y criterios definidos por la OMS, es decir, se deben respetar las condiciones de pinzamiento tardío. Siempre que la madre ha expresado la intención de donar o conservar la SCU (donar, banco público y conservar banco privado), el tiempo de pinzamiento de cordón no debe ser en general inferior a los 60 segundos tras el nacimiento” (pág. 32).

“Que se le han explicado alternativas razonables al procedimiento, como por ejemplo ser donante de sangre periférica o de médula ósea” (pág. 14 ONT). Se debe explicar que la donación de médula de los adultos es una buena alternativa si quieres hacer un acto altruista. ¡DONEMOS MÉDULA! En la donación de médula ósea hay una MAYOR disponibilidad de células madre (pág. 46 ONT).

“La información que los bancos privados proporcionan a los padres sobre las ventajas o inconvenientes que pueda conllevar este tipo de donación, así como de los servicios que ofrecen, ha de ser veraz, clara y basada en la evidencia científica. Los padres deben ser informados sobre la baja probabilidad de usar la propia SCU para trasplante autólogo y que el hecho de guardar la SCU en bancos autólogos no es ningún “seguro de salud” para el niño o la familia, ni garantiza una terapia efectiva ante determinadas enfermedades. Así mismo deben tener presente que el uso de la SCU en terapias alternativas se encuentra en desarrollo y es preciso la continuidad de los ensayos clínicos para obtener resultados con evidencia científica. ONT 202-2025″.

Consideramos que el uso del término "sangre de cordón umbilical" o SCU es incorrecto y sesgado, pues hace pensar que dicha sangre es "extra" o no es necesaria para la criatura. Y simplemente NO ES ASÍ. Es sangre del bebé, y la falta de la misma puede causar problemas a esa criatura tanto a corto como a medio plazo, por deplección de los depósitos de hierro.

Por tanto, abogamos por una terminología más acorde con la realidad: Donación de sangre del bebé. Y por supuesto exigimos que todas las explicaciones que se den a los padres y madres que deseen hacer dicha donación, estén basadas en la evidencia científica y en la realidad fisiológica: Que esa sangre es del bebé y que el bebé la necesita.