¿Qué relevancia tiene que las matronas reflexionen y aprendan sobre el parto en casa?
Habrá quien aún defienda que esta opción hoy minoritaria[1], [2], dadas las cifras de violencia obstétrica[3] y el despojo al sistema de salud público contra el que luchamos, no merece atención e importancia. Y sin embargo, como argumentaremos a continuación, puede ser la clave sobre la que pivota cualquier sistema de salud respecto de todas las embarazadas, también las que no escogen esta opción. Pero vayamos por partes.
Siguiendo el camino abierto por anteriores Colegios e instituciones[4], el pasado 18 de septiembre inauguramos el calendario de actividades tras el verano, dándonos cita en el Colegio Oficial de Enfermería de Sevilla para el visionado del documental “Doctor, quiero parir en casa” y posterior debate. Con cierto impacto en redes[5], más de una veintena de profesionales, entre ellas varias residentes de Matronería así como público en general, tuvimos la suerte de participar en un evento en cierta forma histórico, pues aunaba en una misma mesa, además de la oficialidad institucional representada por el Colegio, a la Asociación Andaluza de Matronas, a la asociación de profesionales de atención al parto en casa Nacer en Casa, a las usuarias representadas por nuestra Asociación, El Parto es Nuestro, y a la autora del documental, Aida Mañez.
Una primera cuestión, simple, sobre la que desde la mesa se puso atención: dado que en el Estado español la formación universitaria básica[6] no contempla la rotación en partos domiciliarios, y tampoco es una opción que forme parte de la cartera de servicios del sistema público para las usuarias[7], las matronas se encuentran ante una ausencia total de conocimiento que, por ejemplo, afecta a la seguridad de los traslados que hubieran de producirse del domicilio al hospital. En un sistema en que no existe continuidad asistencial como el nuestro, las matronas hospitalarias tratan cualquier parto (también el normal, que es el que debería ocurrir en el 85/90% de los casos según la propia OMS) como una situación de emergencia en la que no disponen de más datos y conocimiento sobre la usuaria que su registro histórico (en caso de que exista). Si a ello se le suma el desconocimiento y sesgo que aún pesa sobre el parto en casa (sustraído, insistimos, también de la formación), a menudo nos encontramos con que tanto la mujer como la matrona que la acompañan se encuentran con un trato discriminatorio (¿disciplinario?) por parte del personal sanitario que las recibe; salvo que se trate de personal suficiente informado que, no pocas veces, también es objeto de suspicacias por parte de sus colegas y superiores.
Tanto el documental como el debate posterior contribuyeron también a desmontar un bulo fundamental en relación con la legalidad del parto en el domicilio. Recuerda la abogada experta (y socia fundadora de EPEN) Francisca Fernández Guillén en un fragmento de entrevista:
“El parto es una función fisiológica, y como tal sería ridículo que el Estado la regulase, la limitase y dijese dónde tiene que tener lugar. Igual que no nos dice el Estado dónde tenemos que hacer la digestión o dónde tenemos que concebir a nuestros hijos, pues tampoco nos dice dónde hay que parir. Si lo que te refieres es quizás a la asistencia domiciliaria por parte de los profesionales, también hay que decir que es legal en España; que los profesionales de la salud, sean médicos o matronas, pueden atender en hospitales, en centros de salud o a domicilio. Está expresamente previsto en nuestra legislación”.
No está de más traer aquí también otra cuestión que surgió en el debate y es que son las propias matronas quienes tienen que hacer el ejercicio de re-apoderarse en sus funciones. La matrona tiene atribuidas competencias profesionales en el parto “normal”, como sabemos; pero también (¿lo sabemos/saben?) otras como por ejemplo la asistencia en presentación de nalgas[8]. ¿Tenemos/tienen claro que los protocolos[9] no son instrumentos legales, sino mera guía que ilumina la práctica asistencial, por encima de los cuales siempre estará la Ley de Autonomía del Paciente, y en última instancia la lex artis? ¿O que los planes de parto sí tienen valor legal como documento de voluntades anticipadas[10]? ¿Por qué es importante que las matronas reflexionen y aprendan sobre parto en casa y se sienten a escucharnos a quienes parimos y elegimos esta opción como la mejor para nosotras y nuestras criaturas? Porque también les recordamos, como mujeres, que hemos de conquistar y mantener nuestros espacios, también en el ámbito profesional, frente a la “medicina de los hombres”, que jamás atravesarán sus cuerpos con embarazos, partos y lactancias y aún así nos usurparon sabiduría y acompañamiento. También porque, como recordó Teresa Gómez (socia y matrona veterana de parto en casa, y en su día también matrona hospitalaria y participante en la creación e implementación del parto humanizado en el hospital público de Huércal-Overa de Almería en la primera década de los 2000[11]), dirigiéndose a las actuales pero también a las futuras matronas: “ante las violencias patriarcales, siempre nos queda la desobediencia civil”.
Ampliemos la mirada y volvamos a la afirmación inicial de que la existencia y garantía del parto en casa es vital para todas las embarazadas, con independencia de si es o no su opción.
Con carácter general, la (in)formación tiene que ver con algo previo como es el respeto (inter)cultural. Decíamos que nuestro sistema de salud, al tratar estructuralmente el parto únicamente como emergencia, empuja a las matronas a recibir parturientas a las que conocen en ese mismo y vulnerable momento. No solo el color de su piel, el hecho de llevar o no velo, la presencia o no de tatuajes, la evidencia de escasez de recursos materiales… Entre los factores que activan sesgos en la abrumadora mayoría de profesionales, también podemos incluir el hecho de venir de un parto en casa. Seguimos con interés iniciativas como la del propio Colegio de Sevilla de formación en mediación intercultural en salud pero desde la mesa y desde aquí reivindicamos también que acercar más información sobre el parto en casa, minora la ignorancia, mejora la calidad del abordaje intercultural por parte de l@s profesionales y, en última instancia, nos enriquece como sociedad.
La inclusión del parto en casa dentro de la cartera de servicios públicos (y con independencia de que la opción continúe como hasta ahora también dentro del ámbito de la salud privada) -otra de las reivindicaciones que mantenemos como Asociación[12]- conllevaría la extensión de derechos para aquellas embarazadas que no pueden costearse los 2.000 a 3.000€ de media que supone este servicio en el ámbito privado.
Tan importante como eso es la visibilización y validación del sistema de salud. En un sistema en el que el parto en casa no es visible, no se valida desde el ámbito público, y solo es accesible económicamente para algunas, ¿podemos hablar realmente de libre elección de las mujeres? ¿Seguiría siendo una opción tan minoritaria si estuviese apoyada por el sistema público? ¿Si a todas nos llegase la información sobre la seguridad[13] y beneficios[14] que supone para madres y criaturas? La garantía y protección del parto en casa implica la garantía y protección de las libertades de las mujeres respecto de sus procesos sexuales. Hoy por hoy, el parto en casa es el único que garantiza la continuidad asistencial desde el inicio del embarazo hasta el momento del parto en nuestro país. Y el conocimiento, validación e incorporación dentro del sistema, de la misma forma que en su momento ocurrió con las estrategias de humanización (sic.) o está ocurriendo tímidamente con las unidades de partos dirigidas por matronas y las casas de nacimiento[15], sirve a la mejora de la práctica asistencial y la transformación radical de la asistencia al parto desde el paradigma de la enfermedad y la urgencia al de la salud y respeto emocional y fisiológico.
Por todo esto (e igual todavía por más argumentos que se nos escapan), afirmamos que la protección del parto en casa es la clave sobre la que pivota cualquier sistema de salud que atiende a las mujeres en el embarazo. Con independencia de si finalmente lo eligen o no. Mejores partos y nacimientos para unas debe repercutir en mejores partos y nacimientos para todas.
El documental “Doctor, quiero parir en casa”, aborda de forma concisa y narrativamente impecable las cuestiones más básicas que madres, matronas, personal sanitario y sociedad en general deberían conocer. Desde El Parto es Nuestro seguiremos apoyando la inclusión de este material audiovisual, que se transforma de divulgativo a didáctico, tanto en los Colegios de Enfermería y sus Vocalías de Matronería, como en las Universidades y ojalá también en otros espacios institucionales, académicos, científicos y de activismo feminista.
Y desde el GT de Parto en Casa os animamos de todo corazón a atravesar la experiencia del visionado y del encuentro alrededor.
Septiembre de 2024,
Grupo de Trabajo de Parto en Casa
partoencasa@elpartoesnuestro.es
Notas:
[1] Datos actualizados a diciembre de 2021, accesible en https://www.epdata.es/datos/partos-casa-nacimientos-datos-estadisticas/237/espana/106
[2] En los años 70, todavía bajo la dictadura franquista, se terminó de sustraer el parto del ámbito domiciliario y se llevó a los grandes centros que, en cierta forma, industrializaron y mecanizaron la atención. Aún así, los partos en casa aún suponían un total de unos 80.000 nacimientos en 1985, frente a los alrededor de 1.200 hoy en día. Sobre la historia, en general, de la matronería en el Estado español resulta esclarecedor el libro de Dolores Ruíz Berdún Historia de las matronas en España y puede consultarse una de las estadísticas más importantes realizadas sobre el parto domiciliario en España, en el estudio de cohortes restrospectivo, único de alcance y calado realizado s.e.u.o. hasta la fecha, en el artículo Mortalidad perinatal en los partos únicos asistidos a término en España entre 1995 y 2009 según ocurrieran en domicilio particular o en centro sanitario.
[3] https://www.elpartoesnuestro.es/blog/2023/03/13/la-tercera-ira-la-vencida
[5] Algunos ejemplos: https://colegioenfermeriasevilla.es/sala-prensa/el-icoes-ofrece-el-video-forum-doctor-quiero-parir-en-casa-este-18-de-septiembre/
https://x.com/ICOESevilla/status/1836452659735224770
https://x.com/ICOESevilla/status/1836463374541955503
https://www.instagram.com/p/DAENdpbxVXP/?igsh=N3J6cWR2d2Nib3dn
[6] Orden SAS/1349/2009, de 6 de mayo, por la que se aprueba y publica el programa formativo de la especialidad de Enfermería Obstétrico-Ginecológica (Matrona) https://www.boe.es/eli/es/o/2009/05/06/sas1349. El único posgrado del Estado español hasta la fecha (s.e.u.o.) con formación en materia de parto en casa de la Universitat de Illes Balears, tampoco contempla esta rotación práctica con equipos de matronas domiciliarias.
[7] Sí lo es, con mayor o menor cobertura en países de nuestro entorno y OCDE. Ya en 2007 la Agencia de Evaluación de Tecnologías Sanitarias de Andalucía recibió una consulta de la Secretaría General de Calidad y Modernización sobre la situación y organización de la asistencia a los partos domiciliarios en los países desarrollados, y tuvo oportunidad de pronunciarse en su informe sobre el Parto a domicilio programado. Situación actual en los países desarrollados.
[8] Art. 55 f) del RD 1837/2008, de 8 de noviembre.
[9] Se recordó también que el Informe de Evaluación de la Estrategia de Atención al Parto Normal ya recogía que, a pesar de que en teoría un porcentaje altísimo de centros habían adaptado sus protocolos a la EAPN, su cumplimiento aún distaba de las expectativas del propio Ministerio en el momento de su implementación y seguimiento.
[10] Marta Busquets Gallego, El plan de parto como documento de instrucciones previas https://revistes.ub.edu/index.php/MUSAS/article/view/vol5.num1.3
[11] https://www.diariodesevilla.es/sociedad/atencion-humanizada-parto-extiende_0_265473701.html
[12] Junto con otras como, por ejemplo, la Associació de llevadores del part a casa de Catalunya (ALPACC).
[13] https://webs.academia.cat/revistes_elect/view_document.php?tpd=2&i=17195
[15] Con todas las resistencias al cambio de la clase médica https://www.elpartoesnuestro.es/blog/2023/01/11/cierre-temporal-del-centro-de-nacimientos-de-martorell-mas-alla-de-la-falta-de