Historia sobre una Kristeller a modo reducido.
Testimonio 28 de la Campaña Stop Kristeller
Por "Monitopos", España. Recibido el 10 de diciembre de 2012.
En mi caso llegue al hospital con 3cm de dilatación, me dijeron que estaba de parto y me ingresaron, me negué a oxitocina y se cabrearon conmigo, me dejaron "tirada" enchufada a una maquina que no me podía mover, sangraba mucho y estaba muy asustada, recuerdo aquella sala enracholada como un matadero.
A las 3 horas me hicieron caso y al hacerme un tacto, estaba de 8, no soportaba el dolor, tenia miedo y mi marido alentado por las personas que esperaban fuera me decía que pidiese la epidural, me la ofrecieron y caí en la tentación.
Me llevaron a sala de partos, epidural, oxitocina a chorros, no subía no bajaba las contracciones, era una línea plana prácticamente, tumbada, una sed horrible, solo daban cubitos, pedía sentarme y me tumbaban, la comadrona me rompió las aguas sin pedir permiso, la ginecóloga le echó la bronca.
Pujos dirigidos cada poco, nervios, cada vez mas personas mirando, hablando, el bebe bajaba pero subía, en posición tumbada, un gine muy amable me pegó un empujón en la barriga sin avisar que pegue un grito del dolor que me causó (aun tengo molestias en la zona), pujos dirigidos con comadrona subida en un taburete empujando con todas sus fuerzas en la barriga, horas de expulsivo y como no bajaba tenían miedo que saliese la cabeza pero quedase atorado en hombros. Total, cesárea. Kristeller de mi primer hijo a modo reducido.