Mi parto. Nacimiento de Zoe

Relato de experiencia. Mi parto. Nacimiento de Zoe.

El día 15 de diciembre del 2016 fue mi cumpleaños número 30, ese día sentía que Zoe quizás quería salir al exterior, fue mi primer embarazo, junto con mi pareja nos habíamos preparado con clases de parto y plan de parto para que el nacimiento fuera lo “más natural”, teníamos claro que cosas no queríamos que pasará.

En la noche del 15 fuimos a la puerta porque sentía que tenía una leve pérdida de líquido amniótico, en el Casmu (centro de salud privado) me examinan y me dicen que no tengo tal pérdida que siga esperando, por lo que nos fuimos para casa.

Al día siguiente fuimos a la playa, y al regreso rompí bolsa, era líquido teñido con meconio por lo que decidí ir al hospital para que Zoe esté controlada más de cerca, fui a un subcentro de emergencias que me quedaba más cerca ya que no tenía transporte, allí el médico de guardia no me examina solo me pide que le muestre la pérdida de líquido y pide una ambulancia, la cual demora bastante, las contracciones empezaron hacer más seguidas y con apenas un poco de dolor, en el tiempo de espera allí, me preocupe por los latidos de mi bebé y le pregunté si no tenía algo con que escucharlos, fue a buscar con un Doptne que no marcaba los latidos solo se oían, los escucho 15 segundos. No hizo comentario de eso.

Cuando quise acordar vino la ambulancia, fuimos con la sirena prendida, no me explican por qué, al llegar a la maternidad del Casmu, la médica de guardia me dice que me pasaron como una bradicardia fetal, pero ella me escuchó los latidos y me los mostró y no había tal bradicardia. No tenía dilatación del cuello todavía.

Al subir a sala me colocan junto con una muchacha en un pequeño cuarto (el Casmu tiene salas de nacer) me dan una bata rota pido para cambiarla, me dicen que no hay más y que tampoco puedo usar mi ropa. (Lo pedía en mi plan de partos, el cual entregué al ingreso)

La partera fue a controlarme los latidos, me dice que hay que controlarle los latidos cada poco por el meconio, y que si en 6 horas no comienzo el trabajo de parto me colocarán una inducción, le menciono que tengo un plan de parto y que no quiero inducción, no me contesta nada. Los latidos estaban bien y empezaba a tener buen patrón contráctil.

El ginecoobstetra de guardia vino a la sala, me menciona que está de acuerdo con mi plan de parto, lo único que a las 6 horas de rotura de bolsa me tienen que pasar antibióticos por el riesgo de infección, me indica que me den comida y que me pasen a la sala de nacer, allí estábamos mi pareja y yo solos, pelota de pilates, ducha, música, pasaban las horas y las contracciones eran más intensas y seguidas, parecía que ya se acercaba la hora.

A las 8 de la noche (6 horas después de que rompí bolsa) cambia el equipo de guardia, médica y partera vienen a verme, me preguntan cuántas horas de ayunas llevo, le digo que recién cené, se miran, hacen gestos, no dicen nada, me tactan apenas tenía un cm de dilatación, la médica indica a la enfermera que me pasen algo en voz baja, y yo pregunto qué es y para que, me contesta que es simplemente un sertal que va a ayudar a dilatar el cuello.

La enfermera que me puso la vía para el antibiótico y el sertal al pincharme en la región de la muñeca me provoca sensación de hormigueo, con un fuerte dolor que me irradiaba al dedo índice, al decírselo me responde irónicamente: “hay tendrás un nervio en la vena” y me muestra como la sangre pasa por el catéter.

Pasaban las horas y la médica había indicado que estuviera en ayunas (por las dudas???) Las contracciones eran mucho más fuertes y seguidas, me bañaba, me sentaba en la pelota, caminaba, en el siguiente control de latidos fetales al parecer no estaban muy bien, y la médica de guardia menciona que puede deberse al ayuno, por lo que, yo, menciono que me den algo de comer, y ella dice que es mejor que pasen un suero??? Me tacta ya el cuello había reblandecido, se volvió central, pero seguía solo con 1cm.

Ya las cosas no estaban siendo muy entendibles… Pasaron un par de horas más las contracciones intensas, todo el tiempo tratando de enfocarme hacia el mantra “ohhmmm” cada vez más fuerte, pero mi mente ya no era la misma, había cosas que no me gustaban, sentía poca empatía porque se diera el parto.

A las 5 am (15 horas de que rompí bolsa) sentía que no podía más, cansada, preocupada, le dije a mi pareja que llamara a la doctora por primera vez, le mencionamos la situación de agotamiento y dijo: “bueno pero te voy a tactar porque si dilataste vas a parto”. No había dilatado.

A la hora me llevan a block, las contracciones seguían fuertes y muy muy seguidas, agotada, decepcionada, no podía moverme, en block la anestesista me pregunta primero: cuantas horas de ayuno tienes? Creo que desde las 7 le dije, a lo que contesta: “no me mientas que te podes ahogar y morir”, pide que me siente y me incline hacia adelante, dolorida hice lo que pude, ella al parecer enojada, con un tono intimidante dice: “ a pero así no puedo, más derecha por favor” le digo que tengo una escoliosis, vuelve a decir: “no estás colaborando, alguien que la mueva”, vienen ayudantes me tratan de mover, vuelve a comentar (todo el tiempo con el mismo tono de voz): “ no me estás ayudando, bueno voy a pinchar sin ver nada, así a la nada” y con mucho miedo sentí como entraba la aguja en mi cuerpo.

Cuando sacaron a Zoe, fue como si me la arrancaran, sin emoción, sin sentidos, en el plan de parto pedí que al menos se la dieran al padre en caso de cesárea, lo cual volvi a decir en voz alta en el block, al sacar a Zoe me la muestran un segundo y se la llevan, ella no lloró ( apgar 9/10) la tienen neonatologa y enfermera, 10 min después la trae el padre me la dejan, no sé, 5 -10 minutos se la llevan y no dejan que el padre esté con ella.

Estuve dos horas en recuperación, cuando vuelvo al cuarto, mi bebé aún no estaba allí, mi pareja me comenta que no se la daban porque “se había enfriado”, y mi madre que vio salir del block a la enfermera con su nieta, vio como la dejó en el pasillo un rato mientras conversaba con sus compañeras.

Cuando traen a Zoe una enfermera nos dice que si teníamos más ropa de abrigo para ella (había mucho calor, verano!) le dijimos que trajimos alguna ropa pero poca de abrigo, nos regañó, nos hizo sentir mal, y mi pareja que no había dormido, fue a buscar esa bendita ropa, (pestañeó manejando y tuvo una accidente, sin lesiones por suerte).

No usó la ropa.

Una vez los tres juntos íbamos re bien, venían enfermeras que “te ayudan con la lactancia” algunas ayudaron, otras no tanto.

En una oportunidad Zoe no quiso comer a las “3 horas”, vino justo una enfermera… “bueno, hay que darle complemento”, Zoe tampoco quería, ella la agarró la puso media sentada y vi como se lo metía a la fuerza, cuando terminó de tomar hizo un episodio de tos y vomitó todo, se la lleva la enferma diciendo: “vos come tranquila que ahora te la traigo”, no podía más de rabia, llanto y dolor.

La trajo a los 15 minutos, menciona: “le medí el oxígeno y está bien, le pasé la leche por sonda”, “no pasó nada, porque te sentís mal, solo trataba de ayudarte”.

Al día siguiente otro grupo de enfermeras se la llevan para hacerle los exámenes de rutina, les pregunto si al menos puede ir la abuela con ella, me dicen no porque es acá al lado, y sentíamos como lloraba de lejos.

El día del alta fue casi normal, digo casi, porque normal hubiera sido en el medio del campo.

Quise compartir esto con ustedes, porque evidentemente hay cosas que no se obraron muy bien.

Pienso que quizás este sea un grano de arena, para cambiar ciertas mentalidades que piensan que: aun el maltrato psicológico y verbal logra algo, que la protagonista no es la madre sino “la institución y sus funcionarios”, que lo más “natural” posible es un riesgo de salud, que cuanto más intervenciones tengan, más sano saldrá, que el plan de parto no importa en lo absoluto…

Queda mucho por recorrer para llegar a un parto humanizado en el Uruguay.

Gracias