Parto de Vanessa. Nacimiento de Leire. Hospital San Juan de la Cruz, Úbeda.

"Entonces me vino una contracción insoportable, muy dolorosa y me volví loca, me puse a gritar que me pusieran lo que fuera que me moría de dolor, ... mi ideal de parto natural creí que me sobrepasaba, -no soy tan fuerte –me decía a mí misma, pero... las siguientes contracciones fueron mucho mas leves, con ganas de pujar, la matrona me iba indicando y yo notaba la cabecita de mi bebé... en dos pujos salió la cabeza y en el tercero salió completamente...no duró ni cinco minutos!!...es el ser mas bonito que he visto nunca, nos miro con unos ojos grandes, y me volví a enamorar...ya apenas se ha separado de nosotros"

No os podéis hacer una idea de lo felices y satisfechos que nos sentimos con nuestra pequeña y la bienvenida que ha tenido a este mundo...

Salía de cuentas el 20 de Julio, y como en Málaga no habíamos conseguido que respetaran nuestros deseos acerca de cómo dar a luz, el día 17 nos fuimos para Úbeda, donde habíamos alquilado un piso por 15 días. El día 19 nos atendieron en el Hospital San Juan de la Cruz dos matrones, Antonio e Isabel, con los que previamente nos habíamos puesto en contacto (un encanto los dos, les estaremos eternamente agradecidos) me abrieron historial y me pusieron monitores, todo estaba bien, y quedamos para el lunes 24, que Isabel estaba de guardia, para otro control, ya que mi fecha probable de parto habría pasado y tendrían que ver cómo estaba la placenta y la niña...los días transcurrían paseando, de turismo, cine...y el día 21 empezaron las molestias: cuando iba al baño al limpiarme veía una especie de gelatina rosácea- me alegre mucho – y sentía contracciones muy espaciadas y leves que me hacían despertarme por la noche, pero enseguida me volvía a dormir; el 22 fuimos a comer por ahí, y por la tarde al cine, con contracciones cada 20 minutos, estas eran más fuertes que las del día anterior, pero eran soportables...al salir fuimos a dar un paseo hasta las 23:30 h, sentándonos cada dos por tres porque el dolor iba en aumento, pero lo llevaba muy bien, me sentía muy feliz y segura de que todo iba a ir bien...luego en casa cenamos y mientras veíamos la tele ya empezaron a ser cada 3 minutos, mas dolorosas, pero llevando la respiración que aprendí en las clases de preparación al parto todo era mas fácil...a las 02:00 h nos fuimos al Hospital, ya notaba que el proceso estaba empezando, allí, Rafa, otro matrón muy cariñoso, me exploró ( no sentí dolor en ninguno de los tactos, que si no recuerdo mal fueron 3 en total) y me puso monitores, siempre explicándonos qué iba a hacer y para qué servía: nos dijo que sólo había borrado el cuello del útero, así que iba para largo...me ofreció un calmante que me ayudara a relajarme y descansar entre las contracciones, y dudé, pero preferí esperar un poco, quería sentirlo todo!,y me mandaron a planta a una habitación.

Allí me senté en una butaca para estar vertical y ayudar lo más posible a mi niña y mi marido fue al coche a por la pelota de dilatación y una botella de agua. En ese rato que estuve sola noté el estómago revuelto y vomité. Cuando llegó mi marido le dije que se acostara él y que descansara un poco, que luego iba a necesitar su ayuda... y sentada en la butaca las contracciones eran cada vez mas dolorosas, yo me concentraba y trataba de llevar la respiración, pero notaba cómo tenía el canal de parto cerrado porque tenía la sensación de que me iba a hacer caca, así que me fui al baño a sentarme en el water, me sentí mas cómoda, además en cada contracción hacía un poco de pis y caca … entonces si que sentí el canal de parto abierto y relajado…me volví a la butaca…

A la hora y media o así me apeteció acostarme, mi marido se levanto y me tumbé, y, al hacerlo ¡rompí aguas! Que sensación mas agradable, no me lo había imaginado así, me gusto sentir ese liquido tan calentito donde mi niña se ha sentido tan segura este tiempo, fue muy emocionante...entonces me llevaron a una sala de dilatación donde otra matrona, Charo, me exploró...DE 6 CMS! Esto estaba en marcha e iba rapidito!! Entonces empezaron las contracciones realmente fuertes, intentaba llevar la respiración y pensaba "canal de parto abierto, sopla a tu bebé, mi niña, ya mismo te tengo en mis brazos, sal tranquila que todo va a ir bien...” mi maridín no dejaba de animarme y darme cariñitos, pero dolía de veras, aunque el tiempo que pasaba entre las contracciones era suficiente para descansar un poquito y esperar a la siguiente…estaba tumbada en una cama donde me monitorizaron para controlar al bebe -unos minutos solo- me dijo la matrona...lo cierto es que, aunque hubiera querido no me habría podido poner de pié…al rato volvieron las ganas de hacer caca y le dije a mi marido que avisara a la matrona, para quitarme los monitores e ir al baño... cuando vino me hizo otro tacto...DILATADA COMPLETAMENTE!

Si no había pasado ni media hora!! No eran ganas de hacer caca, era mi niña que ya quería salir...Entonces me vino una contracción insoportable, muy dolorosa y me volví loca, me puse a gritar que me pusieran lo que fuera que me moría de dolor, fueron unos segundos eternos, pero se me pasó y me alentaron todos con sus palabras, ese fue el único momento en el que mi ideal de parto natural creí que me sobrepasaba, -no soy tan fuerte –me decía a mí misma, pero la matrona me dijo que ya solo tendría que empujar cuando me diese otra contracción y mi niña estaría con nosotros...las siguientes contracciones fueron mucho mas leves, con ganas de pujar, la matrona me iba indicando y yo notaba la cabecita de mi bebé... en dos pujos salió la cabeza y en el tercero salió completamente...no duró ni cinco minutos!! no me dio tiempo de sentir ni el aro de fuego ni nada...solo a mi pequeña!! Notar cómo salía fue lo mejor de todo el parto, y nada mas salir me la pusieron en el pecho, piel con piel...es el ser mas bonito que he visto nunca, nos miro con unos ojos grandes, y me volví a enamorar...ya apenas se ha separado de nosotros, ni en el Hospital, donde durmió conmigo todos los días, ni en casa...

Todo estaba perfecto, el test de apgar al minuto: 9, a los 5 minutos: 10. Un pequeño desgarro con dos puntos por fuera y tres por dentro...apenas me molesta...para coserme, yo misma salí andando de la sala de dilatación al paritorio y allí mismo, junto a nosotros, le hicieron todas las pruebas a la niña…y mi marido lo grabó todo…no nos pusieron ninguna pega…y teteamos desde la primera hora, cuando se enganchó y ya no ha querido soltarse... . No la bañaron hasta pasadas 24 horas, y nos informaban en todo momento de lo que le iban a hacer, y podíamos estar presentes en todo momento…al bañarla, al cambiarla, en las visitas del pediatra…

Nuestras expectativas respecto a cómo sería el nacimiento de nuestra hija se han superado con creces…yo creo que la confianza en el Hospital y el saber que un proceso natural es lo mejor para el bebé y para la mamá es fundamental…y nosotros no lo dudamos ni un momento…y volveremos a repetirlo cuando queramos tener otro hijo.

Vanessa Fernández Simón, mamá de Leire. Málaga.