Pues hablando en serio, si realmente sospechamos que este tipo de artilugios pueden ser perjudiciales para la salud de bebés o mamás, ¿podríamos tener la opinión de un experto y promover con ello algún tipo de denuncia a quién competa? No sé si estoy siendo demasiado idealista o exagerada, pero el último comentario me ha hecho replanteármelo.
Por cierto, quizá no sea lugar, pero hoy, Día del Padre, si me lo permitís, me gustaría felicitar a todos los papás (y futuros papás) que ejercen como tal, con independencia de la biología: esos que quieren a sus niños, que quieren pasar tiempo con ellos y creen en la crianza y el cuidado co-responsable. Y por supuesto, aquellos que luchan con nosotras por una mayor igualdad y un mayor respeto a la mujer, incluyendo en un momento tan importante como es el de traer hijos al mundo.
Gracias papis. Y gracias por el post.