La mala suerte sí que existe. Tengo una amiga que pilló la toxoplasmosis con 37 años en su primer embarazo.
Por ella no había peligro pero si lo había para el bebé. Estuvo en el hospital y tuvo que tomar medicación (no sé si era un antibiótico o qué era).
Por suerte, sólo quedó en un susto y no le pasó nada al peque que tiene un par de meses más que el mío y se llevan fenomenal.