Me emociona profundamente leer esta noticia.
Hace casi dos años, y después de unos breves instantes en mis brazos, se llevaron a mi hijo a pasar sus primeros días a la UCI. No tenía nada grave, básicamente se necesitaba mantenerlo en observación. Entonces... ¿por que separarlo de mi? ¿por que no podía ponerlo al pecho (ni cogerlo siquiera!!) durante esos días? ¿por qué solo verlo por 10 minutos tres veces al día a través del cristal!!!?? Ninguna respuesta que valga la pena. Desde entonces comparto intensamente vuestro deseo que esto no le vuelva a ocurrir a ninguna madre, y por fin parece que podría ser realidad.
Ahora ¡¡que se ponga en práctica de una vez!!
Mil gracias por vuestra labor, ¡sois las mejores!