Yo! yo lo levanto. Me sentí acompañada desde el primer minuto. Ni me rajaron, ni me empujaron, ni me pincharon. Fueron estupendísimas conmigo. Me atendieron estupendamente. De excepcional nada, en mi familia somos muchas mujeres y ninguna de mis primas, ni cuñadas ni las mujeres de mis primos se sintieron maltratadas por nadie en el hospital, todas estamos en etapa de crianza y conocemos bien todo lo que se dice, porque también tenemos internet y es un tema de conversación muy común. Ayer mismo, en reunión de mamíferas donde también acogemos amorosamente a las que dan biberón hablamos de esto. Que hay casos en que si, por supuesto pero yo no conozco ninguno en mi entorno. De todos modos echar a mi marido o a mi madre de mi lado, lo diga San Michel Odent o Santa Laura Gutman no es para mí. Prefiero la compañía de alguien que me quiera y que no me cobre.