Ýo no creo que se esté atacando a las matronas si no al sistema de atención a las embarazadas. En grandes ciudades, donde, efectivamente, estas profesionales están desbordadas hace falta más personal, ,pero también voluntad, algunas querrán cambiar algo y otras nada. Las malas prácticas parten de los profesionales, no de las embarazadas y eso es algo que las matronas deben reconocer, porque sí hay malas matronas, que de acompañamiento emocional no quieren saber y que creen que nada debe cambiar. Lo peor es que la sociedad piensa que esto debe de ser así y por eso existe esta asociación, para que esa mentalidad cambie, y lo hará sólo si las propias mujeres embarazadas hablan de en alto de todo ello. Basta ya de tapar todo, de pasar de puntillas por las cosas como si no pasase nada, pasan muchas cosas y no se puede mirar al otro lado.