Tiviste mucha suerte, jamás me he sentido tan desamparada como cuando murió mi hijo en mi vientre y solo me decían tienes que parir, es lo mejor para tí... estaba rota, como dices, y aún no he podido sanar del todo, fuí dejada sola en una cama por horas, sintiendo el dolor mas brutal que he sentido, deseando un abrazo, queriendo a mis otros hijos conmigo... a la final logré que me hicieran una cesárea y no pude ver a mi hijo... aún me siento rota!