Hola! me ha encantado leer tantos comentarios de perfiles tan diferentes. La realidad a día de hoy (2022) en Puertollano sigue siendo un sin fin de negligencias médicas que se acumulan sin consecuencias por desconocimiento de la población general de que las cosas podrían ser de otra manera y por miedo que infunden los profesionales médicos sobre las madres que en ese momento son personas extremadamente vulnerables.
Con esto, entiendo que las matronas defiendan su trabajo, pues seguro que en los casos que se les permita a lo mejor pueden hacer una gran labor con un pequeño porcentaje de mujeres, pero en una serie de mujeres las matronas no son ni conscientes de las decisiones que toman los obstetras. (Alguna obstetra se librará de estas prácticas negativas).
No me corresponde a mi relatar los hechos que le ocurrieron a mi amiga, pero os aseguro que son aberraciones y que las matronas tenemos que luchar por proteger a las mujeres y garantizarles, al menos, que NUNCA se les separe de su bebé.