Queridísima Anabel, una mujer grande, que nos hizo grandes a todas las mujeres que tuvimos la suerte de conocerla. Mil gracias por empoderarnos a nosotras y a nuestras criaturas, por tu inteligencia,dulzura, fuerza, sentido del humor, por reivindicar el respeto, el placer, el autocuidado...dejas un legado enorme... qué el mundo te sea leve...