Querida Anabel entraste en nuestra familia como si te conociésemos de toda la vida, sabías que ibas a regalarnos uno de los mejores momentos de nuestra vida. El nacimiento de Leonardo. Gracias por regalarme la posibilidad de tener un parto sin estrés, gracias por confiar en que yo podía hacerlo...Tu presencia en este mundo ha dejado una enorme huella. Te queremos