Cuanto dolor hay en las puertas de neo!!! Recuerdo la cara de los nuevos cuando amablemente les informaban del horario de visitas. "Dos visitas de media hora al dia, maximo dos personas, familiares solo por la tarde". La fila de padres a la puerta, intentando disimular el dolor y la angustia.
Las madres lactantes teniamos el "privilegio" de si era posible coger a nuestros hijos en brazos 20 min cada 3 horas. Entrabamos, nos lavabamos las manos y esperabamos que el nuestro fuera de los primeros. Asi tendriamos unos minutos más de tiempo. Luego de los 20 min venian a por ellos, los pesaban y como si de un examen se tratase volvian a decirnos la cantidad que habian engordado (tomado). El fracaso o el orgullo de madres medido en gramos.
Recuerdo claramente el miedo que tenía de no conocer a mi hijo y la obsesion por que mi hijo me reconociera. Mis minutos los pasaba cantandole una cancioncilla inventada por mi, con la esperanza de que al menos recordara mi voz.