Hace 2 meses perdí mi embarazo de 16 semanas y ayer supe que fue por una corioamnionitis. Fue una experiencia obviamente terrible pero, tras leer por lo que habéis pasado muchas de vosotras, creo que tuve suerte.
Tras un primer trimestre horrible, sobre la semana 15 me volví a encontrar mal. Un jueves noté mayor flujo y malestar, pero pensé que sería un resfriado otoñal. Algo que me llamó la atención es que tenía las pulsaciones a 120 estando en la cama. No fui al médico sino que decidí esperar debido a una terrible experiencia en la semana 5 de embarazo en la que el médico del hospital donde vivo me hizo esperar 8h sin comer ni beber, sangrando y con dolor para echarme la bronca por ir a urgencias en el inicio del embarazo, argumentando que los abortos espontáneos son comunes y que él no podría hacer nada si fuera el caso. Como entenderéis, cuando me volví a encontrar mal en la semana 15 no quise ir al hospital arriesgando con ello encontrarme a ese infecto-médico. El viernes por la noche me sentí peor y el sábado apenas tenía fuerzas pero no tenía dolor, que apareció al final de la tarde de ese día. Mi sintomatología hasta entonces constó de malestar, falta de fuerzas, pulsaciones altas y, eso sí, muchísimo flujo (en 3 h llenar una compresa). A las 19h del sábado llamamos a una ambulancia por el súbito dolor que tuve y a las 22 estaba dando a luz a nuestro hijo-feto muerto. No puedo dejar de pensar que si no hubiera tenido aquella experiencia con aquel monstruo-doctor y hubiera ido antes al hospital nuestro bebé se hubiera salvado. La experiencia no fue físicamente tan terrible como otras explicadas aquí y doy gracias por ello, pero fue mi 4 aborto seguido y el primero que pasó las 12 semanas, así que pensar que lo perdí por una infección que afecta tan sólo al 1-2% de los embarazos y que en muy pocas ocasiones hace perder al feto es emocionalmente muy duro.
Un saludo a todas y ánimos. Yo lo volveré a intentar, aunque tenga que pasar 15 veces por la odisea de ese día. Vale la pena.