Totalmente de acuerdo con Edurne Uriarte.
Las mujeres tenemos que apoyarnos y asociarnos para que este maltrato a las parturientas no se siga perpetuando, porque los sanitarios no van a esforzarse en cambiar las cosas, ya que ello les va a suponer (aparentemente) más trabajo e implicarse emocionalmente en cada parto. Para ellos es mucho más fácil seguir un árbol de protocolos establecidos y cortar todos los nacimientos con el mismo patrón, y como nosotras no nos quejamos...