Me pregunto:
¿que debe haberle pasado en la vida a aquella matrona que trata de mal manera a otra mujer en un momento tan delicado y especial como el nacimiento de una nueva vida?
¿que relación tiene la matrona/gine con su feminidad, con su sexualidad, con su maternidad, con su parte tierna y compasiva para contribuir activamente a la exposición de la parturienta y a un bebé a tal violencia?
¿cuanto dolor, rencor o odio debe haber vivido y tener guardado un ser humano para actuar sin escrúpulos, violando la experiencia de intimidad que implica el parto/nacimiento?
¿donde se esconde "la niña herida" de cada una de las profesionales que perpetúan los malos tratos en la "relación de ayuda" en el ámbito de la salud femenina?
Romper el silencio desde adentro, denunciando los males de "nuestro mundo" es como empezar a provocar un terremoto al interior del sistema sanitario, cuyos mecanismos han llevado al desprecio sistemático de la usuaria...
Gracias a quienes aportais vuestro testimonio, pequeños y grandes héroes. Gracias por existir, sobrevivir y ser parte del sistema siendo críticos, atentos, conscientes y generadores de cambios en el mismo.
Junto a las mujeres... lo conseguiremos.