El lunes pasado estuvimos en urgencia con nuestro hijo de 2 años y medio.
Sin entrar en detalles tuvo entre las manos una bolsita de veneno para los ratones. Pudimos comprobar gracias al analisis que no habia tomado nada. Nosotros estabamos casi seguros, primero porque no le dio tiempo, luego por lo mal que sabe segun toxicologia y en fin no habia indicios de que hubiera tomado. Pero, por ese casi fuimos a urgencias.
Allí tuvimos que desvestir al niño para obligarle a beberse un vaso de carbón diluido en agua (contraresta los efectos de los anticoagulantes), el pobre paso un rato horrible. Fue una tortura de verdad, tomarse este brevaje de la mano de sus padres a jeriguillazos, estaba eructando, parecia la niña del exorcista escupiendo ese liquido negro. Todo el cuerpo enegrecido, nosotros llenos de manchas porque le sujetabamos, le abrazabamos, dandole besos, pareciamos todos unos mineros.
Lo limpiamos un poco, y a nosotros, y le sacaron sangre. Ya empezamos "ahora van a salir los papas" y yo, con sonrisa triste: "no, gracias" Y la enfermera 1 "es que nosotras preferimos trabajar solas" yo: "si, la entiendo, pero no nos vamos a ir" la enfermera 2 "nos tendran que dejar hacer nuestros trabajo" mi marido ojoplático "hombre es que yo pensaba ayudar a sujetarlo" y yo "solo quiero sujetarle la mano y hablarle"
Mascullo entredientes "es que me ponen cuando se quedan..."
En ese momento no pude mas que estar con mi hijo pidiendole perdón por todo el daño inecesario que le estabamos haciendo pero tenía que haber tranquilizado a esa mujer y hacerle saber que "LOS PADRES NO SOMOS ENEMIGOS" podemos ayudar de muchas formas.
Pasamos la noche en una habitación de pediatría y nos fuimos al día siguiente despues de comer.
Los analisis revelaron lo que ya sospechabamos y solo un parametro hizo que tendremos que volver a sacarle sangre a final del mes: la creatinina. Suele alterarse cuando tenemos convulsiones o hacemos un sobre esfuerzo muscular.
Este niño lo paso tan sumamente mal con una tensión muscular del carrajo que se vio reflejado en su análitica.
¡Entonces no se merece un crio en tan estresante situación tener el apoyo de sus padres!