Vivo en un país tercermundista donde centenares de mujeres mueren en partos por exceso de intervencionismo e intervencionismo negligente sin hacerse cargo e las consecuencias. Donde con un sistema de salud pública se manda a una madre con fisura de bolsa a su casa diciéndole que se ha hecho pis. Y si mal no recuerdo, Puerto Rico ronda la tasa del 70 por ciento de cesáreas, las barbaridades no se dicen gratuitamente y me consta el maltrato de los hospitales y de su personal, de las episiotomías cocidas en carne viva con las palabras "bien que te gustó cuando lo hacías, ahora aguantatela".