Hay como cierto repelús generalizado en este caso... ¡hombre, en un parto normal, pues se entiende, pero en una cesarea, la pareja solo molesta..." Es así de triste.
Pero no, la pareja no molesta, o no molesta a la que debe ser la protagonista... no puede molestar la pareja cuando tampoco molestan 1, 2, 10 estudiantes... eso no es escusa...
Se me ponen los pelos de punta de pensar en las mujeres que no sólo lo pasan mal por tener una cesarea, si no por lo que viene después: separación de su bebé, horas interminables en recuperación, ver a su bebé por foto porque alguien se ha acordado de que la mamá todavía no ha podido verlo, olerlo, tocarlo...
La cicatriz puede haber quedado perfecta para el bikini, pero la otra, la cicatriz de la que muchas veces hemos hablado, no hay cirugía que la sane... tal vez sólo una buena terapia y mucho mucho amor.
Un beso a todas las madres poderosas que chillan para que sus cesareas se respeten, que denuncian por las no respetadas. Un abrazo a los profesionales que entienden esto.