Se creen q somos monas amaestradas, está claro. Los malos profesionales ( que no son todos pero abundan y para colmo en puestos de responsabilidad) opinan q les haremos caso porque les hemos bajado la cabeza y ofrecido nuestras barrigas para que hagan con ellas lo que les parezca. Supongo q se estará frotando las manos y deseando que aparezca la siguiente mamá para mostrarle quien manda en "su" servicio. La ley no les ampara, sólo nuestra ignorancia y permisividad. Espero q la princesita que va a nacer aprenda taekwondo para defenderse del imbécil que pretenda hacerle lo mismo que a su madre.
En todo caso, quien rie la última, rie mejor. Mucho ánimo que ya queda poco.