Y mucho cuidado con las drogas que nos meten sin decir que nos están metiendo y sin pedir nuestro consentimiento.
En mi caso esa droga convirtio mi parto en una autentica tortura, era como si me hubiesen atado y amordazado de una forma química, el dolor por supuesto siguio ahí, no quiero ni pensar en los efectos a largo plazo que podria tener sobre mi hija.
Alguna madre me ha contado que a ella le fue bién con esa droga (desconozco si la droga que la metieron a ella era la misma que me metiron a mi).
Así que os prevengo, no a todo el mundo le va bien y los efectos pueden ser totalmente indeseables.