Yo las ví por primera vez en la unidad de neonatos donde trabajo y me encantaron.
A pesar de ser una unidad abierta a los padres 24h y donde se practica y fomenta el método canguro, los padres tarde o temprano se van a descansar a casa, ducharse, etc... y más en los ingresos largos. Las mamás se ponían las manitas en el pecho para que olieran a ellas y nosotras se las poníamos al bebé en la incubadora mientras no estaban. Además de ser útiles xq por su consistencia ayudaban a mantener un buena posición al bebé tambien le relajaban con el olor de su madre.
Evidentemente con mis hijas no se me ha ocurrido comprarlas porque para eso ya estaba yo, pero en circumstancias extraordinarias pueden ser útiles. No hay que ser tan cerrado de miras...