Por favor, que le cambien algún día el nombre a esta profesión. Me asusta pensar en la MATRONA añosa de la SS que me tocó en suerte que ni saludaba. Si me dirigía la mirada era para fulminarme y me tiraba las muestras publicitarias con un "ponte esto en la barriga". Menos mal que ya no estaba en paritorio, sino en consulta.
Prefiero la palabra "COMADRONA", la que está junto a la madre y no la que "manda" sobre la madre, que parecerá una tontería pero es lo que me sugiere la palabreja.
Pues eso, más comadronas como la que describe Ariadna y que los giñes no las anulen.