Gracias a apoyocesáreas me he reconciliado conmigo misma, con mi cuerpo y mi capacidad de parir.
Creía que era rara por estar triste, si tenía una niña preciosa a mi lado. Ahora veo que no soy rara y que, desgraciadamente no soy un caso aislado. Pero gracias a este grupo humano sé que voy a darle a mi segundo hijo el recibimiento que se merece, el que se merecen todos los bebés.
Lo encontré por casualidad y ahora no sé que haría sin mis chicas!! Gracias a todas!!!! (Bueno, y a los pocos todos)