Hola Estrela,
No estoy de acuerdo contigo en que la carta deba llegar a la dirección directamente, las personas que están en contacto inmediato con los pacientes, los protocolos y el equipo hospitalario son los trabajadores "de abajo" (señoras de la limpieza, auxiliares, dues, médicos y demás personal de un hospital), precisamente son esas personas que pueden observar y extraer conclusiones del día a día, las que pueden y DEBEN, impulsar los cambios de un sistema. En este caso el sanitario.
La carta viene a sustituir, por tanto, la necesidad de cambio en una pieza del sistema sanitario, en la que deberían haber hablado los componentes del sistema, siempre que no estén "aletargados" y siempre que en sus centros de trabajo se les escuche, y no se tomen represalias contra los "innovadores".
Precisamente hemos llegado a este punto (en sanidad, y en lo que no es sanidad también), porque se ha pensado erróneamente que las personas que toman las decisiones más acertadas son las que han llegado a lo más alto, dirigiendo centros de trabajo desde habitáculos ubicados en plantas altas, y sin saber hacer nada mejor, que una buena carrera al "estrellato". Para la cual hacen falta muchas aptitudes, sólo en contadas ocasiones deseables y casi nunca coincidentes con las de una persona a favor de cambios.
No podremos citar en la Historia de la Humanidad, ni un sólo cambio que se haya impulsado desde "arriba".
Y en cuanto a los padres que, en caso de abrir las puertas abiertas decidan no ir por la absurda creencia de que no se puede hacer nada...Solo desearles "suerte". Pero no es justificación ni motivo a tener en cuenta, para plantearse si implantarlo o no, allá ellos.
Un saludo,
Adri