yo deseaba muchísimo tener a mi bebé por parto normal, incluso tomamos curso psicoprofiláctico, íbamos a sesiones de la liga de la leche y todo lo que podíamos leer para estar muy informados y que el parto y lactancia fueran de lo más natural. Llegue casi a las 42 semanas sin que avanzara de 2 cm de dilatación. Espere lo más que pude y mi hija no daba señas de bajar más para nacer. Cuando me hicieron estudios para valorar sí me inducian el parto, vieron que ya estaba arriba de los 4 kilos, traía una circular en el cuello (que aún con esta podía nacer normal), también notaron que ya tenía poco líquido... En ese momento me lo dijeron y decidieron por la cesárea, yo al inicio sentí decepción porque tenía muy idealizado mi parto vaginal sobre todo por la información de pros y contras que ya conocíamos. Sin embargo estaba tan mentalizada positivamente y lo que más deseaba en el mundo era poder abrazar, acariciar, oler y besar a mi bebé! Que decidí disfrutar la operación, lo mismo hice con la recuperación, fue rapidísima ya que yo quería estar bien para darle los mejores cuidados a mi nena al lado de su papito. Yo creo que el haber tomado varios cursos y escuchar de todas que el parto natural es lo mejor, me dio mucha información y me ayudó. Sin embargo creo que a muchas mujeres les causa culpa y frustración sí no se logra como querían (les pasó a varias compañeras de curso) y no debe ser así ya que lo más importante es el bienestar de madre e hijo. Siento mucho que les haya pasado eso con sus bebés a la hora de la cirugía, pero no a todas les va de ese modo, así que no Satanicen la cesárea...