Gracias a una matrona muy sabia que me sacó del abandono hace pocas semanas cuando sangraba y lloraba del dolor posparto, sé que: 1) hay muchos profesionales, incluso de los que supuestamente "saben" de la lactancia en el hospital, que dan informaciones muy erróneas y contradictorias (en mi caso, dos días después del parto todos me decían que lo hacía bien y de repente hay sangre, dolor y al pedir ayuda en urgencias me dan biberones) 2) no se enseña como amamantar antes de dar a luz - cuando surgen problemas estamos desamparadas 3) sigue habiendo poco valor para amamantar en público - algo que podría ejercer una función educativa, ya que muchas de nosotras no han tenido relación cercana con bebés amamantados 4) los pediatras, aunque los veamos a menudo tras el parto, dicen muchas estupideces sobre la lactancia (que hay que seguir el "reloj" cada 4 horas o que hay que dar biberones con agua porque la leche no hidrata lo suficiente...). Mi matrona, una profesional que descubrí demasiado tarde, después del parto, tendrá mi eterna gratitud de salvarme de toda esta avalancha de desinformaciones.