Cortar la vagina a una mujer sin que lo necesite es ablación.
En otras culturas lo criticamos duramente, nos parece una salvajada cultural, pero entre nosotros, ante más de la mitad de las mujeres con sus vaginas cortadas (literalmente), tan sólo nos permitimos pensar que por algo será.
Mujeres: despertemos, dejemos de permitir que la ablación institucional de nuestras vaginas siga cargándose la vida sexual de muchas mujeres.
Con todo lo que nos ha costado a las mujeres conseguir poder disfrutar del sexo... para perder ahora la capacidad de disfrutar por prácticas anticuadas y machistas, incapaces de concebir que las mujeres saben parir sin necesidad de ayudas extras del bisturí.