A María CS (se ve que más de 2 respuestas seguidas no se pueden encadenar).
Me alegro de que haya quedado aclarado.
Y por supuesto comparto ese punto de vista, decisión informada (me formé en Inglaterra y debe ser de las frases que más escuche durante mi formación jajaja). La confianza en la persona que está contigo en el parto es crucial. Aumentar el estrés libera la adrenalina, que es antagonista de la oxitocina (reacción natural, como hacen los animales cuando se sienten en peligro, así pueden incluso cortar su parto y salir huyendo).
Con respecto al tema reclamaciones, no se si puedes venir a los meses y poner la reclamación, pero supongo que si puedes dejar escrito tu parecer al trato que recibiste (en plan sugerencia o algo, no lo se, dependerá de cada hospital o comunidad). Si no pues dirigir una carta al jefe de servicio, haciéndola pasar por el registro del hospital para que quede constancia de que se ha enviado (esto fundamental, cualquier papel por registro, incluso el plan de parto, así queda constancia de que lo has presentado).
El principal escollo para que la actitud de los profesionales vaya cambiando es que los usuarios lo demanden. Los que ya estamos de vuestro lado, no nos hace falta (pero por ahora somo mínoría en muchos hospitales, y entre los ginecólogos ya es algo raro), pero mucho van a aprenderlo cuando se lo impongan, y el cambio llevará mucho tiempo sino no lo demanda la sociedad.
Hay que concienciar a las mujeres. Para eso es necesario darle mucha publicidad, que conozcan y entiendan que ellas son las que deben llevar las riendas (yo creo que una asignatura de educación sexual donde incluyeramos el embarazo sería muy interesante, que desde jovenes se entienda y se sepa sobre el tema), y sobre todo seguir una pauta de acción similar a la que se sigue en el reino unido (vamos aplicar la estrategia del parto normal sería un ben comienzo), pero sinceramente, a día de hoy creo que los políticos solo ven una cosa, el tal mercado, que deben quererlo más que a sus hijos.
En fin, que me enrollo y aquí es casi medianoche.
Un saludo