María CS (unverified)
14 Oct 2011
Extraído de una sección de Salud en el diario El Mundo esta mañana (Artículo firmado por Cristina G. Lucio): "Ni horno, ni vitrocerámica, ni calefacción central… Lamentablemente, para una gran parte de la población mundial el fuego más rudimentario sigue siendo la única forma disponible para cocinar y calentar el hogar. La lumbre de leña, el hornillo o el brasero primitivo combaten el frío y son útiles para preparar los alimentos, pero también ponen en grave riesgo la salud de quienes los usan habitualmente, según denuncia la Organización Mundial de la Salud (OMS). Sus datos muestran que, cada año, mueren en el mundo casi dos millones de personas a causa del aire contaminado que respiran en sus casas, una cifra que supera al número de muertos que provoca la malaria. Las cocinas 'sucias' generan graves casos de neumonía aguda en niños y enfermedad obstructiva crónica pulmonar (EPOC) en adultos, además de otros problemas, como infecciones o trastornos en el desarrollo del feto." El mayor problema de las mujeres y sus hijos en países sin desarrollar es la pobreza, porque ser pobres implica malas condiciones de vivienda, higiene, y alimentación. Y mala salud.