Mi hija nació el pasado Agosto en un PVDC, con 4,600 kg, sólo 3 horas después de haber roto la bolsa en casa, pero con dos horas de expulsivo (lo digo por lo de limitar la segunda fase del parto): no se rompió mi útero, ni mi hija sufrió, ni tuve que someterme a inducción, ventosa, episiotomía o gotero y la monitorizaron a ratitos. Parir es fisiológico, sólo hay que dejar que el cuerpo haga su trabajo.