Yo era de las que no dilataba. A mi, mis médicos me llamaron suicida y loca. Cambie de médicos, de hospital y de ciudad. Me apropie de su "cariñoso apelativo" y me convertí en una "loca del pvd2c". Ahora mi hija siempre que vamos al médico o al hospital, luce una camiseta de lo más molona "Soy un PVD2C". Lo hago como obra de caridad (enseñar al que no sabe), una que es generosa.