Muy buen artículo.
El obligarnos a estar tumbadas sin posibilidad de elección convertidas en objetos, además de aumentar el dolor y de perjudicar el proceso del parto hace que vivamos el proceso del parto como una violación de la que no hemos sabido defendernos, hemos permanecido impasibles mientras otros se dedicaban a jugar con nuestros genitales y con la vida de tu hijo.
El observar como se divierten mientras tú estás en una posición de total indefensión, hace que pierdas totalmente tu autoestima y por supuesto la confianza en los demás.