Anabela, yo creo que aquí el problema es que a muchas nos hicieron cesáreas innecesarias o no nos trataron con respeto durante el parto y la cirugía. Francamente, a mí que la cicatriz quede bonita, fea, tapada por el bikini o pintada de brillantina, es que me da igual. Lo que me importa es que mi hijo fue separado de mí al nacer porque lo decidió una doctora con prisa y que a mí me operaron, multiplicando por seis las posibilidades de que me hubiese muerto (con respecto a un parto vaginal) porque ella quería volverse a la cama... De los riesgos para el bebé ni te hablo porque son tremendos, pero la sociedad parece pensarse que una cesárea es agüita del Carmen...
Y sí, me importó caminar doblada, me importó no poder coger a mi hijo sin ayuda y no considero que "la cesárea es un método para parir distinto", sino una cirugía mayor abdominal con muchos riesgos que no debería hacerse a la ligera, sino reservarse para casos excepcionales.
No es cuestión de pelear, es cuestión de no tolerar la falta de respeto que supone minimizar la importancia de la forma de nacer. Bienvenida sea la cesárea cuando salva una o dos vidas, pero solo entonces, por favor. Aquí hay muchas mujeres cuyas cirugías les han dolido y que han logrado superarlo a base de mucho trabajo personal, así que basta de condescendencia y menosprecio.