Qué comentario tan vanal y poco empático el tuyo, Elba!
Te abrazo Eva María... qué puedas sanar tu alma! Revisa que seguro quedaron grandes aprendizajes de lo sucedido... Reconocer tu propia evolución y la de la familia en el camino recorrido desde allí hasta hoy, puede ayudar a aliviar el dolor.
Cariños!