Sara, tienes mi casa a tu entera disposición si se da la situación. Y si, estando a término, cambias de opinión y prefieres no parir en Extremadura, también.
Yo viví allí catorce años y sé cómo están las cosas. Mi hermano murió en el octavo mes de gestación gracias a la "estupenda labor y el saber hacer" del equipo de ginecología del hospital de Mérida.