El problema, Mariela, es que en España la ilustración fue un fracaso, y este fracaso pervive en la sociedad actual (falta de espíritu crítico... y demás males), en lugar de eso hubo inquisición hasta hace unos 150 años y el sistema sigue funcionando como inquisidor. A esto hay que añadirle que somos desconocedores de nuestros derechos y de ahí vienen las consecuencias, y nos callamos todo.