No estoy de acuerdo con algo: luchar por tus derechos y los de tu bebé durante el parto es algo bastante difícil, si no imposible. Yo iba completamente informada a mi parto y había escogido un hospital público respetuoso. Por motivos que no me quedaron claros me enviaron en ambulancia a otro hospital, donde me trataron fatal desde la primera persona que me atendió hasta la última. Encima, como de primeras me negué al enema (lo que molestó soberanamente a mi matrona) comenzaron a realizarme todas las prácticas que les dio la gana sin informarme previamente (no sé si en cualquier caso informan a las pacientes) y como yo preguntaba, engañándome directamente. No sé otras mujeres, pero desde luego yo fui incapaz de luchar contra la mentira y el maltrato en medio de mi parto.
Creo que debemos ser un poco realistas, podemos y debemos luchar, claro que sí, pero el cambio tenemos que conseguirlo no sólo en las mujeres, que al fin y al cabo podemos estar informadas y concienciadas, si no en el personal sanitario que atiende en los hospitales, y eso no se hace estando de parto. No nos comportamos como niñas, nos tratan como tales, que es muy distinto.