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Universos paralelos
Por Susana Ferreiro
- Picasso: muchacha ante el espejo
Siempre que me encuentro a una amiga embarazada, me veo a mí misma durante la gestación de mi hija. Lo que digo y lo que pienso en tales conversaciones no concuerda en absoluto, y eso me asusta. A veces me siento como una hipócrita, mas lo que realmente sucede es que intento no juzgar a esa amiga que muestra confianza ciega en el sistema...
Y ahora soy consciente de que este bloqueo mío, que me impide gritarle "¡Ejerce tu libertad: infórmate y decide!", se debe a que, hasta hace poco, yo era ella....
Yo era la típica embarazada que flota en su nube.
Que aguanta estoicamente todo tipo de comentarios sobre su barriga.
Que se cree que lo fundamental es tener colección de pijamitas y un cochecito fácilmente plegable (porque de lo realmente importante no se habla).
Que espera largas colas para pedir cita para revisiones y pruebas obstétricas cuya utilidad nadie le explica.
Que no se informa sobre la asistencia al parto en su hospital, porque entiende que, de ser vejatoria, en una sociedad igualitaria, ello habría trascendido a la prensa.
Mas esa embarazada, cierto día, se dio de bruces con la realidad y perdió la inocencia.
Y claro, ahora está "del otro lado"... E intenta evitar que otras mujeres pasen por lo mismo... Pero aún está aprendiendo a hablar sobre parto... Porque nadie le enseñó.
Leo estas cosas y estoy profundamente agradecida a este blog, que me ha permitido conocer la "alternativa" del parto respetado (tiene huevos la cosa, con perdón) y la importancia de no dejar de informarse y formarse en éste tema mucho antes de que me vaya a tocar siquiera quedarme embarazada.
Muchas gracias, de verdad!!!! :)
Opino lo mismo queospasa, hay que reservar fuerzas y tiempo que a ninguna nos sobra, para quien quiera oir aunque en principio no entienda, pero por lo menos nos escuche. Poco a poco irá procesando la información e irá comprendiendo. Creo que sembrar en tierra muerta no sirve de nada. Sólo sirve para llevarnos disgustos nosotras.
Aunque hay veces que da pena porque es muy difícil no identificarse con sus vivencias y con su ignorancia, hay que abandonar a algunas mujeres embarazadas a su propio destino. Algunos necesitamos ver para creer, tener las experiencias que nos tocan, agradables o no. A veces hasta salen contentas (o lo parecen).
Me siento totalmente identificada con este texto, mi madre, mis hermanas jamás hablan de sus partos, yo tampoco lo hago, pero no permitiré jamás que mi hija vaya a cualquier sitio a dar a luz, a mi hija si le voy a contar la realidad, me dá miedo que el día que sienta la ilusión de su embarazo yo no pueda prevenirla, que tal vez yo ya no esté aquí.
Puedes transmitirle desde mucho antes la actitud que hará que ella sola llegue a la conclusión: se llama actitud de lucha, de incredulidad, de protección del sistema, actitud de exigencia de derechos...
La semilla no es hablar del parto directamente, el que exige sus derechos en el parto, luego no se deja pisotear en otras cuestiones...
Se trata de una manera de ser rebelde, se trata de criar pequeños "guerrilleros" anti-sistema, se trata de que aprendan a ser felices dentro de la realidad. Se trata de educar en la verdad, y en la libertad.
Puedes empezar ya, para esto no hay edades adecuadas.
Un abrazo,
Adri
Que texto tan precioso.... me encanta, es delicado y transmite a la perfección la melancolía y la tristeza que yo sentía cuando parí a mi primera hija, veía embarazadas por la calle y sentía pena por ellas.... me daban ganas de gritarles: "Corred! Huid! No sabeis lo que os van a hacer!" pero no decía nada.
Ahora, cinco años despues y un parto gozoso mediante, he curado eso y he aprendido a hablar del parto y de mis partos, pero aprender me ha costado sangre sudor y lágrimas (literalmente).
Gracias por este texto.
como cuesta hablarlo!!!! como duele!!
son esas palabras que todas juntas ´contarían un suceso horrible,pero se quedan pegadas en la garganta ahogandote, con un fuerte dolor en el pecho.
y ves una barriga y piensas para tí "ojala no la pase loque a mi"
pero no puedes avisarla porque te cuesta, y lo peor de todo, porque no quiere oir ni ver
¡¡que dolor pensar que la pueda pasar lo mismo!!
para mi es como volver a vivir mi parto en mis propias carnes
me ha encantado tu relato, y me identifico con la frase de "hace poco estaba yo en el otro lado". No sé si hace seis años, cuando estaba embarazada de mi primer hijo hubiese estado preparada para hacerme preguntas sobre el sistema, pero la verdad que no tuve a nadie cercano que me abriese los ojos, tuve que experimentarlo por mi misma, para hacer mi camino de búsqueda, y llegar a mi segundo parto desde el otro lado.
Yo ya no me pongo nerviosa cuando veo una embarazada. Antes quería salvarlas a todas, ahora estoy mas tranquila.
Me pasa algo parecido a lo de Toya. Puedo hablar de parto pero suelo hacerlo con gente que está dispuesta a escuchar, que entiende de lo que hablo y está convencida de que es necesario el cambio. Hace mucho que no me he enfrentado con alguién "hostil" al que haya que "convencer" de nada. No se si es porque huyo de esas personas como de la peste o que evito hablar con ellas de este tema. Supongo que terminaría poniendome nerviosa y pasando un mal rato. En la clase de matronatación hay varias mamás embarazadas de nuevo y yo no tengo intención de preguntarles nada, si ellas cuentan algo, piden opinión pues la dare pero si no no voy a meterme. A una le oí una vez que estaba practicando el M. Estivil con su hijo, a otra que ella había tenido el hijo porque su marido queria, que lo suyo eran más los "perros" y que por eso ella nunca se levantaba por la noche para darle el biberón... total que me huelo que hablar de parto con ellas sería como chocar de frente con una pared...
Yo estoy viviendo mi primer embarazo y no tengo miedo al parto. Al contrario, tengo ganas de experimentarlo y vivirlo al máximo. Lo que me asustan son las prácticas hospitalarias. Hablo mucho de esto con amigas y conocidas que han sido mamás, y la mayoría de ellas salen contentas de sus oxitocinas, episiotomias, partos programados etc etc.... Lo cual es fabuloso... Pero para las que no queremos ese tipo de partos y de trato, tenemos un gran vacío y trabajo por delante.
Soy muy novata en esto, pero creo que la mayoría de las mujeres han renunciado a su parto y se lo han entregado con gusto a los equipos médicos. Respeto todas las opciones, ese es su parto respetado. Pero se debería acoger otro tipo de opciones con la misma naturalidad. Me parece un mundo de locos.
Yo, quiero parir YO
Me encanta!estoy embarazada y desde k li supe no he parado de leer y informarme,lo primero k compre fue un libro sobre lactancia(un milagro para toda la vida..gran tesoro)antes k un pijamita...y desde ahi sigo en la misma linea.parece para alguna gente k voy de sobrada o de leida pero kiero vivir ese momento de parto lo mas natural posible y humano...pk al final entiendo k es eso.sin embargo eso,parece k hablar del tema y decir no kiero epidural es echarte comentarios encima de pk..seras tonta!!menos mal k para eso tengo a mi mama k m apoya bastante.animo!!espero pronto poder contaros k mi parto fue respetado