La incubadora: buen invento, mal uso. (II)
Parte II
La incubadora es, sin duda alguna, un gran adelanto, pero su uso excluyente ha sido negativo. Su función es la de ser el apoyo tecnológico que necesita la madre (o los padres) para cuidar a su hijo prematuro y no el sustituto de la madre. La madre, mediante el contacto piel con piel, continuado provee al bebé del entorno mas adecuado para desarrollarse.
Actualmente, en España gran parte de las Unidades Neonatales
incumplen las recomendaciones poniendo trabas al contacto físico con el bebé.
Campaña Unidos en Neonatos
El contacto piel con piel con la madre regula la temperatura del bebé mejor que la incubadora. Regula también el ritmo cardiaco y desaparece la respiración periódica que se da en los bebés separados. La lactancia para estos bebés es medicina. La leche de la madre se adapta a las necesidades especiales del prematuro. Solo con la lactancia materna desaparece casi por completo la enterocolitis necrotizante que es uno de los primeros motivos de muerte entre prematuros. Por muy pequeño que sea el bebé, el vínculo es posible si existe contacto físico.
El Cuidado Madre Canguro nace en Colombia, como respuesta a la escasez de incubadoras; allí descubrieron que, al permanecer en contacto con la piel de su madre y recibir cuidados médicos, los bebés salían adelante mejor que si se utilizasen incubadoras. Actualmente es el modelo de atención implantado en Europa.
“Lo que convierte a un prematuro en un enfermo es la separación,
porque el hábitat del bebé es su madre.”
-Nils Bergman
Este tipo de atención excluyente se extendió posteriormente también a todos los recién nacidos ingresados. Durante años, se ingresaba a todos los recién nacidos “para observación”. Luego muchos quedaban ingresados por mil distintos motivos: tener baja la glucosa, por ictericia, porque la madre tuvo fiebre, etc., muchos de ellos sin base científica que justifique la separación. También se implantó como “normal” la utilización del nido. Se consideraban de mejor calidad los cuidados aportados por el personal sanitario que los dados por la madre. Este modelo somete a los bebés a una de las mayores torturas conocidas para un recién nacido: la separación.
“Lo peor que le puede pasar a un recién
nacido es ser separado de su madre.”
-Nils Bergman
Sobre la imagen: Un ejemplo de malas prácticas: el cartel de entrada a la Unidad de Neonatología, en la Clínica Casa de la Salud, Valencia. Foto tomada en diciembre de 2012.
Para leer la primera parte de este artículo: La incubadora: buen invento, mal uso. Parte I