Sin haber pasado por una experiencia similar. Me uno a vuestra denuncia sobre la práctica "a la ligera", de estas intervenciones quirúrgicas.
Os apoyo, os creo y os respeto profundamente.
Porque considero que no es necesario haber tenido una cesárea para poder unir nuestras fuerzas e intentar trabajar por el cambio, mano a mano.
Todo mi ánimo, mi buen hacer y mis deseos de felicidad, en el día de hoy, os lo dedico a las cientos de mujeres que habéis pasado por lo mismo, en silencio, aguantando...Perdidas, desvalidas y confundidas.
Es hora de que nos encontremos todas y nos apoyemos. Así, en el mundo virtual. Que se presenta como un espacio potentísimo de encuentro, de fuerza.
Porque la unión, la comunicación hace la fuerza.
De corazón, un fuerte abrazo a todas.
Adri