No nos confundamos

Desde la revista "El Jueves" nos llega esta reacción:

"El Instituto de la Mujer ya ha pedido la retirada de las viñetas por machistas y misóginas; la Asociación de Defensores del Paciente ya ha escrito a la ministra Leire Pajín para que les dé una colleja a los ginecólogos por «reírse con maldad de los pacientes». Y tienen razón. Porque es inevitable que en petit comité los médicos de toda especialidad vean a la humanidad como fábricas de anécdotas sórdidas sobre caries como túneles del AVE y objetos alojados en orificios impropios, como es inevitable que todo el que trabaja de cara al público hable mal del público a sus espaldas (el que esté libre de pecado, etcétera etcétera). Pero publicar los chistes en una gaceta electrónica, que está a un clic en 'reenviar' de sacarse de contexto, es falta de tacto, amigos. Sobre todo cuando, como es el caso, os hacen quedar como putos truños, a vosotros, que necesitáis que mujeres se pongan en vuestras manos."

Efectivamente. Es importante darse cuenta de las diferencias. Lo que molesta, agrede y es motivo de denuncia, no es el hecho de que alguien realice un dibujito sin gracia sobre las dolencias de las mujeres. Si esto mismo se hubiese publicado en una revista de humor... hubiera sido ofensivo, pero no hubiera pasado a mayores. Cada quien se ríe de lo que quiere, tenga más o menos gracia; sea más o menos humor inteligente.

El gravísimo problema y lo que denunciamos, es el lugar desde donde son difundidos: la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia. No nos atrevemos a pensar que en las demás gacetas de cada una de las sociedades científicas se ríen así de los pacientes que tratan. Es decir, ¿Podrá informarnos algún oncólogo en el sala si se publican chistes sobre los tumores de sus pacientes en su gaceta oficial? No se trata de que se rían de las mujeres... se ríen de sus pacientes, que también son personas.

Nos ofende que hasta el momento no se haya ofrecido una disculpa. Y que en vez de ello, se siga defendiendo la publicación como "humor jovial". No señores, no lo es. El humor de esta calaña no tiene cabida en todos los sitios.

Pero además, nos ha sorprendido que desde algunos medios se comente que se trata de una publicación "interna" a la que sólo se puede acceder con claves de asociado. Hoy, podrá ser así... seguramente desde hace cuatro días. La publicación estuvo "abierta" hasta el momento de nuestra denuncia; es ahora que se ha cerrado para protegerla del ojo público.

Por último, nos quedamos con este comentario, copiado y pegado de un lector de "El Jueves",

"Que no es el humor, no es el dibujito lo que ofende, es quien y donde te lo pone en el careto. Si yo compro el jueves y veo chistes de culos, me descojono, pero si me voy a hacer una colonoscopia o a operarme las pelotas y estoy jodido y los allí presentes se empiezan a descojonar de mis atributos, de mi enfermedad o directamente de mí, me cago en sus putas madres o directamente les meto dos hostias. Aunque sean los mismos chistes de El Jueves."

Más alto y más claro... imposible.