Cambia el recuerdo del parto
Waldenström U.
Departamento de Enfermería Karolinska Institutet, Bastugatan 42, 118-25 Stockholm, Suecia.
ENTORNO: La presente investigación consiste de un seguimiento sobre un estudio de las mujeres y los recuerdos de sus partos, que mostraba que un 60% hacen la misma evaluación sobre su experiencia general del parto a los dos meses del nacimiento que al año después del mismo. El 24% se había vuelto más negativo; el 16%, más positivo. El objetivo del estudio era entender qué factores hacen que algunas mujeres cambien su valoración con el paso del tiempo.
MÉTODOS: Se analizaron los datos obtenidos de un estudio de corte longitudinal de 2.428 mujeres, que completaron los cuestionarios al comienzo del embarazo, dos meses después del parto y al año. Se estudiaron dos subgrupos. 1.452 mujeres dijeron que sus partos habían sido experiencias positivas; y 151, que había sido una experiencia negativa. Se realizaron las comparaciones, dentro de cada muestra, entre aquéllas que lo evaluaron de la misma manera al año y aquéllas que habían cambiado de opinión respecto al entorno psicosocial, resultados del parto, de la salud infantil durante el primer año y de las experiencias de los cuidados durante el parto.
RESULTADOS: Se relacionó el cambio de valoración de positivo a menos positivo, generalmente a “sentimientos mezclados”, con un parto difícil tal como un trabajo de parto doloroso o una cesárea; la insatisfacción se relacionó con los cuidados durante el parto; y se relacionó los problemas psicosociales, tales como la soltería,síntomas depresivos y a la preocupación -dsdee el comienzo del embarazo- sobre el parto. Se relacionó el cambio de valoración de negativa a menos negativa con tener menos preocupaciones sobre el parto en los primeros meses de embarazo y con una experiencia más positiva sobre el apoyo recibido de la matrona durante el parto.
CONCLUSIONES: Este estudio sostiene la opinión de que las mediciones de satisfacción con el parto inmediatamente después del nacimiento podrían estar condicionadas por el alivio de que ya haya acabado el parto y por el feliz nacimiento del bebé. Otros aspectos negativos podrían tardar más en aparecer. Los cuidados de apoyo podrían tener efectos a largo plazo y proteger a algunas mujeres de una experiencia negativa duradera. BACKGROUND: The current investigation is a follow-up of a study on women's memory of childbirth, which showed that 60 percent made the same assessment of their overall birth experience at 1 year after delivery as they did at 2 months postpartum, and 24 percent had became more negative and 16 percent more positive. The study purpose was to gain some understanding of what factors make some women change their assessment over time. METHODS: Data from a longitudinal cohort study of 2,428 women who completed questionnaires in early pregnancy, at 2 months, and at 1 year after birth were analyzed. Two subsamples were studied: 1,451 women who said childbirth was a positive experience at 2 months and 151 who said it was a negative experience. Comparisons were made, within each sample, between those who made the same assessment at 1 year and those who had changed their view, with respect to psychosocial background, labor outcomes, infant health outcomes during first year, and experiences of intrapartum care. RESULTS: Changing the assessment from positive to less positive, mostly to "mixed feelings," was associated with difficult childbirth, such as painful labor and cesarean section; dissatisfaction with intrapartum care; and psychosocial problems, such as single status, depressive symptoms, and worry about the birth in early pregnancy. Changing the assessment from negative to less negative was associated with less worry about the birth in early pregnancy and a more positive experience of support by the birth-attending midwife. CONCLUSIONS: This study supported the view that measures of satisfaction with childbirth soon after delivery may be colored by relief that labor is over and the happy birth of a baby. More negative aspects may take longer to integrate. Supportive care may have long-term effects and may protect some women from a long-lasting negative experience. Ilustración: Nana de leche, de Toya Castillo