La placenta previa es una forma anómala de colocación de la placenta. Se habla de placenta previa cuando esta se posiciona cubriendo parcial o completamente el orificio cervical interno o cuello del útero. Esta colocación impide un parto normal y es una de las principales causas de sangrado durante el tercer trimestre del embarazo.
Entre un 0,3 y un 0,8% de los embarazos se ven afectados por esta anomalía, dependiendo de las características del grupo de población investigado. Se asocia una mayor probabilidad de sufrir placenta previa en los casos en que la embarazada ha pasado por alguna cesárea con anterioridad, cuando tiene un alto número de embarazos previos o de abortos tanto espontáneos como inducidos, cuando su edad es avanzada y cuando ya se ha tenido una placenta previa en otro embarazo. En la última década se ha observado un incremento de esta anomalía, relacionada con el aumento del número de cesáreas y con la edad de la madre en el momento de su primer embarazo.
La placenta previa incrementa en 8 veces el riesgo de sufrir un parto prematuro. Estos partos pueden tener graves complicaciones tanto para la madre como para el feto y tienen una tasa de mortalidad materna del 2-3%.
No se debe confundir la placenta baja con la placenta previa. La SEGO (Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia) distingue entre:
• Tipo I. Placenta baja. El borde placentario se implanta en el segmento uterino inferior, no llegando hasta el orificio cervical interno.
• Tipo II. Placenta marginal. La placenta llega justamente al borde del orificio cervical interno, pero no lo sobrepasa.
• Tipo III. Placenta oclusiva parcial. El orificio cervical interno está cubierto de manera parcial por la placenta.
• Tipo IV. Placenta oclusiva total. El orificio cervical interno está totalmente cubierto por la placenta.
Cuando la placenta es oclusiva al final del embarazo no permite el parto vaginal y habría que hacer una cesárea. En los otros casos sí podría intentarse el parto.
¿Cómo identificar la placenta previa?
Al principio del embarazo, lo normal es que la placenta se coloque en la parte baja del útero y a medida que éste crece, se va desplazando y subiendo. Por medio de una ecografía, se puede diagnosticar la placenta previa durante el tercer trimestre del embarazo.
Además, a partir de la semana 24 de gestación, un sangrado vaginal de color rojo brillante e indoloro puede indicar que existe placenta previa. Es el síntoma principal de esta anomalía, pero no sucede en todos los casos. El diagnóstico deberá ser confirmado mediante una ecografía. Y siempre en el tercer trimestre, puesto que hasta ese momento la placenta aún se puede desplazar.
¿Qué sucede si existe placenta previa al final del embarazo?
El procedimiento a seguir cuando se detecta un caso de placenta previa depende mucho de la semana de gestación y de la cantidad de sangre que haya perdido la madre. En caso de que la hemorragia sea leve, se puede esperar hasta la semana 36, cuando el bebé ya esté lo suficientemente maduro como para realizar una cesárea. Es decir, se haría un manejo expectante.
Si la hemorragia es abundante y no se detiene, lo más probable es que se requiera la hospitalización de la embarazada. Si el bebé ya está maduro para salir, se realizará una cesárea. En caso contrario, es posible que la madre necesite una transfusión de sangre e inyecciones de corticoides para favorecer la maduración pulmonar e intestinal del bebé.
En caso de placenta previa y sangrado, están desaconsejadas las relaciones sexuales y también los tactos vaginales y rectales.
Si se maneja de forma adecuada, el pronóstico de esta anomalía suele ser bueno.
Para más información:
- Frequency of Placenta Previa with Previous C-Section. Ayesha Shaukat, Fareed Zafar y otros. Department of Surgery, Obstetrics & Gynaecology, Sir Ganga Ram Hospital/ Fatima Jinnah Medical College Lahore.
- Selected Pregnancy Variables in Women with Placenta Previa. Sohrabi Davood, Parivar Kazem and Ebrahimi Sepideh. Department of Histology and Embryology, Medical Sciences University of Zanjan, Iran. Department of Biology, Sciences and Research Branch, Islamic Azad University, Tehran, Iran. Research Journal of Obstetrics and Gynecology 1 (1): 1-5, 2008
- Emilio Santos. Placenta previa. Revista Tu bebé, agosto 2011